El pasado día 11 de julio el Consejo de Ministros aprobó el anteproyecto de ley para la creación de la oficina española de derechos de autor y derechos conexos.

Los derechos de autor se aplican a las creaciones literarias y artísticas como obras musicales, libros, pinturas, películas, esculturas y todas las obras basadas en la tecnología.

El ejecutivo español ha indicado que se está produciendo una gran expansión de los derechos de autor debido a internet, que se ha convertido en el principal canal de comunicación pública y de reproducción de obras protegidas por derechos de autor; el avance de las redes sociales que ha transformado los canales de comunicación;  las plataformas de streaming que han revolucionado el consumo de contenidos audiovisuales o por el avance de la aplicación de la inteligencia artificial a la creación de obras de arte así como el avance de los NFT los cuales tienen estrecha relación con los derechos de autor (activo digital no fungible encriptado) es necesaria la creación de la mencionada oficina.

Este avance tecnológico está provocando que también surjan nuevas formas de piratería viéndose estas ayudadas de las diversas funcionalidades que ofrecen las redes sociales. El 3,4% del PIB del país está integrado por las Industrias Culturales y Creativas donde constituye un pilar fundamental los derechos de autor.

El objetivo de la creación de la Oficina de derechos de autor es reforzar las labores administrativas del Estado en materia de Propiedad intelectual.

Estas medidas destinadas a la protección de los derechos de autor y los delitos conexos se pueden deber a dos razones fundamentales:

  • Amparar en la legislación los derechos de los creadores y los innovadores sobre sus innovaciones y creaciones, de manera equilibrada con respecto al interés público de acceder a las innovaciones y creaciones.
  • Fomentar la creatividad y la innovación, contribuyendo así al desarrollo social y económico del país.